El contrapunto invertible a la octava.
El contrapunto invertible es una técnica de composición que
sirve para poder trocar (intercambiar) las posiciones de dos líneas
contrapuntíscas superpuestas.
Esta técnica tiene aplicación en muchas situaciones
diferentes, pero es especialmente importante en la composición de una fuga,
dado que el tema (sujeto) va a tener que pasar por todas las voces de las que
está compuesta la fuga.
Para comprender en que consiste el contrapunto invertible
tenemos que pensar en que problemas armónicos pueden producirse en el trocado
de dos voces. La voz inferior pasará a ser la superior y viceversa.
Dependiendo de cual sea el intervalo al que se desplaza una
respecto a la otra tendremos contrapunto invertible a la octava, novena, décima,
oncena, duodécima etc., de los cuales, los mas practicados son el contrapunto
invertible a la octava, a la décima y a la duodécima.
Especialmente se usa el contrapunto invertible a la octava
que tiene aplicación en multitud de ocasiones y es el que vamos a practicar
este curso.
Cuando se invierte un intervalo y la voz inferior pasa a
estar por encima de la inferior transportándola una octava mas alta, o
viceversa, la superior es la que se desplaza hacia abajo transportándola una
octava baja, lo intervalos armónicos resultantes se pueden ver en la siguiente
tabla:
Intervalos antes de la inversión
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8va
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7a
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6a
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5a
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4a
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3a
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2a
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Unísono
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Intervalos después de la inversión
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Unísono
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2a
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3a
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4a
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5a
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6a
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7a
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8va
|
Veamos un ejemplo:
Como se puede observar, todos los intervalos disonantes, al
invertirlos, pasan a ser otro intervalo disonante, lo que implica que el
tratamiento que hay que darles es el mismo. Recordemos las reglas de forma
abreviada; las disonancias en parte fuerte deben ser tratadas como retardos y
en parte débil deben moverse por grados conjuntos.
Pero en el caso de los intervalos consonantes, hay una
excepción. Todos pasan a ser consonantes menos la 5ª que al invertirla pasa a
convertirse en 4ª, que se considera disonancia. En el ejemplo anterior se puede
observar el problema en el compás 5, el cual se considera un error.
Por tanto, en el contrapunto invertible a la 8va, las 5as
armónicas deben recibir el mismo tratamiento que las 4as, es decir,
en parte fuerte deben ser tratadas como retardos y en parte débil como notas de
paso o floreos.
En el ejemplo 1 la 5ª está preparada y resuelta en un
intervalo de sexta, que es una consonancia imperfecta. Al invertirlo se produce
la disonancia de 4ª que resuelve sobre una consonancia imperfecta de 3ª.
En el ejemplo 2 la 5ª está preparada y resuelta en un
intervalo de 4ª en parte débil y por grados conjuntos. Al producirse la
inversión tenemos una disonancia de 4ª preparada y resuelta en un intervalo de
5ª, que es consonancia perfecta.
De las dos soluciones, es preferible la solución del ejemplo
1. La resolución de una 4ª sobre un intervalo de 5ª es factible, pero debe
evitarse en la medida de lo posible porque el efecto es menos satisfactorio, al
resultar un sonido mas “hueco”.
En el ejemplo 3 se observa el tratamiento de la 5ª como si
fuera disonancia en parte débil, ya que se mueve por grados conjuntos, de tal
manera que al invertir las voces a la 8ª se tengan 4as en parte
débil que se muevan de forma análoga.
Así de simple es el contrapunto invertible a la 8ª. La única
novedad con respecto a las reglas ya estudiadas es el tratamiento de las 5as
como si fueran 4as . En
contrapartida, las ventajas compositivas que proporciona este contrapunto
superar ampliamente la pequeña dificultad añadida.
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